Otro capítulo de transición, mejor que el anterior aunque nada del otro mundo.
Lo más interesante ahora es la nueva posición de Marcus, que aún no tiene claro a qué reina servir, aunque por lo menos no se ha chivado. Por cierto, la guarida de Diana ya parece el metro en hora punta, ya ha pasado por allí hasta el tato, casi parece increible que ninguno haya coincidido con Anna, le han tenido el “ascensor” ocupado todo el santo día entre unos y otros.
Por fin ha recuperado la memoria Joshua, hay que ver si se pone “al cargo” otra vez o qué va a hacer, parece que le ha echado el ojo al huevo e igual se lo carga, ya veremos.
Me ha gustado lo de Chad, como si descubriera de repente lo mala persona que le ven los demás compañeros de trabajo y va a querer redimirse, me da la impresión, de alguna forma.
¡Ah! y a Tyler no hacía falta que le den más “éxtasis”, conque ponga su cara nomal ya le basta y sobra.